Consejos para terminar tu Matrimonio de manera saludable

Consejos de como acabar con un matrimonio en forma saludable

El matrimonio es una institución que implica un compromiso entre dos personas que se aman y se respetan. Sin embargo, a veces las cosas no funcionan como se esperaba y la relación se deteriora hasta el punto de que lo mejor es separarse. ¿Cómo hacerlo de una manera saludable, sin causar más daño del necesario?

Aquí te ofrecemos algunos consejos que pueden ayudarte a terminar tu matrimonio de forma civilizada y madura, cuidando tu bienestar y el de tu pareja.

Reconoce que la decisión es definitiva

Antes de comunicarle a tu pareja que quieres el divorcio, asegúrate de que no hay marcha atrás y de que has agotado todas las posibilidades de solucionar los problemas. No uses la amenaza del divorcio como una forma de manipular o chantajear a tu pareja, ni como una forma de escapar de los conflictos. Sé honesto contigo mismo y con tu pareja sobre lo que sientes y lo que quieres.

Busca el momento adecuado

No le digas a tu pareja que quieres el divorcio en medio de una discusión, cuando los ánimos están caldeados y las emociones a flor de piel. Tampoco lo hagas en un momento en el que tu pareja esté pasando por una situación difícil, como una enfermedad, una pérdida o un problema laboral. Elige un momento en el que ambos estén tranquilos y puedan hablar con calma y respeto.

Explica tus razones

No basta con decir "quiero el divorcio" y ya está. Tu pareja merece una explicación de por qué has tomado esa decisión y qué ha fallado en la relación. No se trata de echarle la culpa o de hacerle sentir mal, sino de ser sincero y asumir tu responsabilidad. Evita los reproches, las críticas y los insultos, y enfócate en expresar tus sentimientos y necesidades.

Escucha a tu pareja

Después de decirle a tu pareja que quieres el divorcio, dale la oportunidad de expresar su opinión y sus emociones. Es probable que se sienta sorprendido, dolido, enojado o triste, y que tenga muchas preguntas o dudas. Sé empático y comprensivo, y trata de responder con claridad y respeto. No minimices ni invalides lo que siente tu pareja, ni le digas cómo debe reaccionar.

Busca ayuda profesional

Terminar un matrimonio no es fácil, ni para ti ni para tu pareja. Puede ser un proceso doloroso, estresante y conflictivo, especialmente si hay hijos o bienes en común. Por eso, puede ser conveniente buscar la ayuda de un profesional, como un terapeuta, un mediador o un abogado, que te oriente y te apoye durante el proceso. Un profesional puede ayudarte a manejar tus emociones, a comunicarte mejor con tu pareja, a negociar los términos del divorcio y a proteger tus derechos e intereses.

Cuida tu salud física y mental

El divorcio puede afectar tu salud física y mental, causándote ansiedad, depresión, insomnio, problemas digestivos o dolores de cabeza. Por eso, es importante que cuides tu alimentación, tu sueño, tu ejercicio y tu ocio. Busca actividades que te hagan sentir bien, como leer, escuchar música, meditar o hacer yoga. Rodéate de personas que te quieran y te apoyen, como familiares o amigos. Y si sientes que necesitas ayuda psicológica, no dudes en buscarla.

Mira hacia el futuro

El divorcio no es el fin del mundo, sino el inicio de una nueva etapa en tu vida. No te quedes atrapado en el pasado ni en el rencor, sino mira hacia el futuro con optimismo y esperanza. Aprovecha esta oportunidad para reinventarte, para descubrir nuevas facetas de ti mismo, para cumplir tus sueños o para encontrar un nuevo amor. Recuerda que el divorcio es una decisión que has tomado para ser más feliz, no para sufrir.